En una época donde los medios de comunicación se han diversificado de una manera explosiva, la lluvia de nuevas ideas empapa cada instante de nuestras vidas. Mas que nunca es importante regresar al único recurso que ha sostenido a los cristianos a través de los Siglos, la Biblia.
Tenemos que regresar a las escrituras. Y este retorno no comenzará por la sociedad sino por la iglesia misma. Si bien, en general, los cristianos evangélicos estamos de acuerdo en la inerrancia de las escrituras y en su procedencia divina, en la práctica encontramos la realidad que en muchos casos no sostenemos las escrituras como suficientes.
La Iglesia de hoy, especialmente en latinoamerica, está corriendo trás fuentes fuera de las escrituras para encontrar "nueva revelación" o nuevas experiencias. Algunos inclusive se ha atravevido a decir que tales cosas son imprescindibles para una crecer en la relación con Dios. Como resultado, encontramos cristianos en una constante cacería por nueva revelación y nuevas experiencias, tropezándose sin duda con enseñanzas y manifestaciones que distan mucho de ser bíblicamente sanas.
El Señor nos recuerda constantemente, que para el cristiano, la Biblia tiene que ser suficiente. David en el Salmo 119 escribe "Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley" (Salmo 119.18) y mas adelante añade "andaré en libertad, porque busqué tus mandamientos" (Salmo 119.45). Es la Escritura quien nos enseña de nuestro Dios, la que nos revela el plan de salvación para nuestras almas y nos muestra la voluntad de Dios para nuestras vidas.
En todo momento, no importa que dificil sea, la Biblia tiene que ser suficiente. En nuestras dudas y nuestras ansiedades la Biblia es suficiente, en soledad o tristeza su palabra es mas que suficiente. Teniendo la guianza del Señor en su palabra no necesitamos nada mas.